El impacto de la elección de materiales y soluciones para alcanzar una arquitectura saludable
Desarrollar una arquitectura saludable significa incluir características en los edificios que no solamente los hagan más eficientes, sino que también tengan en cuenta parámetros que influyan directamente en la salud de las personas de forma positiva.
Un edificio con una mala climatización o iluminación, mal insonorizado y con materiales con sustancias tóxicas puede terminar generando un estrés térmico, enfermedades respiratorias, problemas de visión, enfermedades del sistema endocrino y dificultades en la concentración y el descanso.
En nuestro caso, tenemos muy presente la salud de las personas dentro de los espacios y por ello en nuestra solución de Climatización Invisible por suelo radiante el panel Uponor Klett Autofijación está certificado conforme a los valores de compuestos orgánicos volátiles (COVs), aporta un mayor aislamiento acústico ya que los paneles cumplen con los requerimientos normativos de aislamiento en particiones horizontales, y al tener un alto valor de aislamiento térmico, mejoran la envolvente disminuyendo la demanda térmica de los edificios y aumentando su confort.
En este sentido, disponer de Climatización Invisible por suelo radiante, pared o techo mejora la salud de los ocupantes por ser una climatización que trabaja a temperaturas más cercanas a la temperatura corporal, no generando grandes diferencias que puedan crear estrés térmico en las personas, y a la vez consume menos que otros sistemas, siendo más eficiente especialmente a la hora de trabajar con bombas de calor aerotérmicas.
En este sentido, disponer de Climatización Invisible por suelo radiante, pared o techo mejora la salud de los ocupantes por ser una climatización que trabaja a temperaturas más cercanas a la temperatura corporal, no generando grandes diferencias que puedan crear estrés térmico en las personas, y a la vez consume menos que otros sistemas, siendo más eficiente especialmente a la hora de trabajar con bombas de calor aerotérmicas.
Todas estas características consiguen, por ejemplo, un impacto positivo de nuestras soluciones para la obtención de la certificación WELL, un sistema de puntuación para edificios que mide su impacto en la salud y el bienestar de las personas.
Qué parámetros medimos para certificar que nuestra vivienda es saludable
Diseñar edificios que garanticen un gran confort y bienestar a las personas, siempre en base a evidencias científicas, debe asegurar el buen comportamiento del mismo ante parámetros que van desde la calidad del aire interior, iluminación, confort térmico y acústico, hasta el diseño de espacios y la incorporación de vegetación que puede apoyar a la salud emocional así como servicios que faciliten y promuevan la actividad física en los mismos, con todos los beneficios que se conocen para la salud de tener una vida más activa y menos sedentaria.
Además, volviendo a nuestras propias soluciones, existen dos parámetros donde influimos positivamente. Por un lado una buena calidad de agua nos va a prevenir de contraer enfermedades como por ejemplo la legionelosis, entre muchas otras. En este sentido nuestro porfolio de soluciones HIU´S (Heat Interface Unit) minimizan los posibles riesgos de contaminación del agua caliente sanitaria (ACS). Y por otro lado, el uso de materiales no contaminantes y no tóxicos que no deriven en consecuencias en la salud de las personas.
Materiales que minimicen la emisión de compuestos orgánicos volátiles (COV)
Los Compuestos Orgánicos Volátiles (COV) son hidrocarburos que se convierten en vapores o gases a temperatura ambiente. Los COV son liberados por disolventes, pinturas, botes de laca, aerosoles, aromatizantes y muchos otros productos, también se producen en la quema de combustibles.
En referencia a los daños que pueden ocasionar en la salud de los seres humanos, hay que tener en cuenta que pueden afectar tanto a las vías respiratorias cómo a través de la piel ya que tienen la capacidad de acumularse en las grasas de cualquier organismo vivo causando problemas respiratorios, irritación, mareos, dificultad de concentración, daños en órganos o sistema nervioso e incluso algunos son cancerígenos.
Es importante realizar estos ensayos en todos los materiales, no sólo en los que están en contacto con el aire, ya que, aunque estos son los que mayor impacto tienen sobre la salud, todos los materiales van a emitir partículas durante su instalación.
En el caso de los paneles de suelo radiante, aunque durante su vida útil quedan debajo de una capa de mortero y del pavimento final, durante su fase de instalación podría emitir COVs afectando a la salud de los operarios que lo estén instalando y al medioambiente.
El compromiso de Uponor: innovación y divulgación
Los fabricantes tenemos numerosas soluciones ya desarrolladas que son más saludables y eficientes. No obstante, a menudo el problema principal es el desconocimiento de las mismas o el precio. Si una solución supone un incremento de precio a menudo acaba siendo descartada si se desconocen sus beneficios más allá de su funcionalidad directa o su estética. Para superar esto es importante concienciar y formar sobre la importancia de la salud en los edificios y apoyarse en certificados sostenibles que dan valor a estas características.
Judith Masip, responsable de Sostenibilidad e Ingeniera de Field Service en Uponor Iberia.