La vivienda, a la que se llama Edelweiss House, es una vivienda de demostración y, por lo tanto, tiene más prestaciones de las que necesita una vivienda normal. Por ejemplo, tiene tres sistemas de calefacción con la principal fuente de calor que proviene del sol. “Las ventanas cumplen con la mayoría de los requisitos de calefacción”, dijo Reynolds. “Nuestra fuente de calor principal es la radiación solar pasiva”.
Además, un sistema de distribución del piso radiante hidrónico de 10 zonas se combinó con una caldera eléctrica para eliminar los pisos fríos (incluso con un refrigerante R-32 con valor de lana mineral debajo de la losa). Por último, una bomba de calor de aire exterior a aire interior sin conductos debe funcionar cuando la radiación solar no proporciona suficiente calor. “El sistema radiante garantiza que la losa nunca se torne helada”, aseguró Reynolds. Y con los duros inviernos en Canadá, los propietarios de viviendas valorarán mucho el calor radiante, ya que sentirán suma comodidad térmica y un calidad de aire superior con el sistema radiante de Uponor.
Debido al objetivo de usar la vivienda como una herramienta de aprendizaje, la casa Edelweiss House incluye acabados, materiales y accesorios con bajo impacto ambiental, como accesorios de plomería de flujo bajo, aislamiento con lana mineral (incluida aquella que se usa debajo de la losa), un techo de vegetación y pinturas de interior y adhesivos de piso con compuestos orgánicos de volatilidad cero.
“El mensaje más importante que queremos transmitir es aquel de no mirar los requisitos básicos del código de construcción como el objetivo por alcanzar y luego solo resignarse a gastar muchísimo dinero todos los meses para bombear el calor y traerlo a tu casa“, dijo Reynolds. “Las personas piensan que el período de recuperación es de 25 años, y no es así. La recuperación del dinero comienza cuando tu vecino enciende la calefacción y tú no”.